cremita de culo negro Soy originario de Esmirna y vivo en Estambul con mi esposa Sevcan y mi hijastra Eda como funcionaria pĂșblica. Una noche, un dĂa laborable, recibimos una triste noticia de Esmirna, un pariente de mi esposa habĂa fallecido. La persona fallecida no era un pariente, pero mi esposa aĂșn querĂa ir. Cuando mi esposa nos pidiĂł que fuĂ©ramos juntas, le recordĂ© que no podĂa obtener permiso de mi lugar de trabajo, y tambiĂ©n que Eda tenĂa escuela y asistĂa a un curso de tenis despuĂ©s de la escuela, y le dije que no podĂamos ir por ella, pero que podĂa enviarla si querĂa. Mi esposa se preparĂł en poco tiempo, la llevĂ© a la terminal y la subĂ al autobĂșs de Esmirna.
Cuando lleguĂ© a casa, Eda vestĂa camisĂłn y miraba televisiĂłn en la sala de estar. Fui al baño y me di una ducha. DespuĂ©s de ducharme, me puse un par de pantalones cortos y fui a la sala de estar, me sentĂ© junto a Eda. Eda â ÂĄQue estĂ©n sanos!âme besĂł en las mejillas, diciendo. Eda era una dulce niña de 16 años. Como mi esposa es hija Ășnica, mimarĂa a Eda como a mi esposa, me importarĂa un comino lo que ella dijera. Mientras bromeaba y jugaba con Eda, acariciaba casualmente su fĂsico suave, piernas suaves, vagamente pechos,manos sobre ella. Cuando mi esposa fue a Esmirna, aunque fuera por unos dĂas, Eda y yo Ăbamos a estar solos en casa. PensĂ© que esta era una buena oportunidad para mi sueño, que he estado diseñando durante mucho tiempo, pero que no he tenido la oportunidad de implementar.
Me levantĂ© del pasillo y entrĂ© en la habitaciĂłn donde estaba ubicada la computadora. EncendĂ la computadora, apaguĂ© el volumen de los parlantes y comencĂ© a ver una pelĂcula. Mi polla ya estaba metida en mis pantalones cortos, era como una estaca. Luego puse la pelĂcula debajo de la pantalla presionando Pausa y entrĂ© en los sitios donde hay imĂĄgenes grĂĄficas erĂłticas y ligeras de Internet y tambiĂ©n las arrojĂ© debajo de la pantalla. InclinĂ© la silla de la computadora hacia atrĂĄs, me ajustĂ© la polla en los pantalones cortos y llamĂ© a Eda: âÂĄNaveguemos por Internet un rato, veremos zapatos nuevos o algo asĂ!âporque. Cuando Eda apagĂł la televisiĂłn y entrĂł, la sentĂ© en mi regazo. DespuĂ©s de que revisamos algunos sitios de zapatos juntos, me inclinĂ© sobre el respaldo del asiento y dije: âÂĄAdelante!Dije. Me recostĂ© mirĂĄndola, mientras sus caderas se apoyaban contra mi polla, casi bailando con mi polla.
DespuĂ©s de un rato, Eda dijo: âOh, ÂżquĂ© es todo esto? ÂĄSe han abierto muchas pĂĄginas de spam! diciendo: âabriĂł una de las pĂĄginas erĂłticas que arrojĂ© debajo de la pantalla. Estaba estudiando las imĂĄgenes subidas de tono en la pantalla con pura atenciĂłn. Aunque sĂ© muy bien lo que estĂĄs viendo, yo digo :â DĂ©jame ver, ÂżquĂ© son?âdicho esto, comenzamos a mirar las fotos juntos. ElegĂ especialmente las pĂĄginas que arrojĂ© debajo de la pantalla, las imĂĄgenes comenzaron con poses erĂłticas ligeras de chicas jĂłvenes en tangas y sostenes, continuaron con poses completamente desnudas en las pĂĄginas siguientes, y en las pĂĄginas posteriores las imĂĄgenes se convirtieron gradualmente en Porno Hardcore con remen follando. Mientras mirĂĄbamos la primera pĂĄgina, tambiĂ©n comentĂĄbamos los cuerpos de las chicas desnudas en las imĂĄgenes. Dado que los senos de Eda eran muy pequeños, ella estaba tratando de averiguar mis pensamientos sobre los senos, especialmente de las chicas en las fotos. Solo estaba diciendo que me gustan especialmente las chicas con pechos pequeños.
Cuando se trataba de las fotos de pĂžrnĂž follada y picada, Eda comenzĂł a presionar mĂĄs sus caderas contra mi polla, que latĂa como un corazĂłn. DecidĂ sacar mi polla de mis pantalones cortos. Le dije a Eda: âÂżPuedes subir el volumen del altavoz?Dije. Cuando Eda se levantĂł de mi regazo y se inclinĂł hacia adelante para encender el botĂłn del altavoz, saquĂ© mi polla de los pantalones cortos y la hice sentar sobre mi polla mientras me recostaba. Ahora solo quedaban sus bragas debajo de su camisĂłn entre mi polla y el coño de Deca. A pesar de sus bragas, pude sentir el calor abrasador de su coño en mi polla. Eda me frotaba ligeramente la polla de un lado a otro, cerrando una de las pĂĄginas y abriendo la otra. Mientras tanto, estaba poniendo mi mano debajo de su camisĂłn, en su ombligo, acariciando su ombligo decentemente.
Eda dijo: âÂżNo le vas a decir a mamĂĄ que estamos viendo esto, verdad?âcuando ella dijo, tomando mi mano acariciando su vientre hasta su pecho Decapitado y acariciĂĄndolo suavemente,â ÂĄNo te preocupes, todo permanecerĂĄ en secreto entre nosotros! AdemĂĄs, ahora has crecido, te has convertido en una niña adulta, ÂĄes tu derecho mĂĄs natural explorar y experimentar algunas cosas!Dije. La respiraciĂłn de Eda se hizo frecuente, y cada vez que inhalaba y exhalaba, su pecho endurecido tocaba mi palma. Era hora de encender la pelĂcula, me inclinĂ© hacia adelante, hice clic en la pelĂcula, la hice a pantalla completa y presionĂ© Inicio. De la pelĂcula (ÂĄAhh, Uhh! ) empezamos a mirar acompañados de sus voces. Con el pretexto de llevar la pelĂcula de un lado a otro, seguĂ frotĂĄndome el coño en bragas de Eda en mi regazo. Eda entendiĂł la razĂłn de la rigidez que forzaba sus bragas mientras veĂa la pelĂcula, y se frotĂł en mi polla sin causar ningĂșn daño. Me recostĂ© bien y sostuve a Eda sobre mi polla para ayudarla a frotarla.
Pronto sentĂ que sus bragas se mojaban, Eda tuvo un orgasmo. Estaba a punto de correrme, y apenas pude contenerme. SeguĂa pensando que si eyaculaba, podrĂa asustar a Eda. Afortunadamente, la pelĂcula terminĂł rĂĄpidamente. Inmediatamente levantĂ© a Eda de mi regazo, metĂ mi polla en mis pantalones cortos y apaguĂ© la computadora. Apenas lleguĂ© al baño y tan pronto como saquĂ© la polla de mis pantalones cortos, vine con una explosiĂłn tremenda. Mi esperma habĂa corrido hasta el espejo sobre el fregadero. Cuando terminĂ© de eyacular, limpiĂ© el espejo y el lavabo con papel higiĂ©nico y limpiĂ© el semen derramado. Luego me metĂ en la ducha y me lavĂ© la polla. Me secĂ©, me volvĂ a poner los pantalones cortos y salĂ del baño.
Mientras tanto, Eda habĂa entrado en la sala de estar, habĂa encendido la televisiĂłn, estaba vestida en el sofĂĄ triple, estaba acostada con los ojos cerrados. DebiĂł sentirse avergonzado por lo que acababa de suceder, fingĂa estar dormido. SabĂa que no dormĂa, pero decidĂ participar en este juego suyo. ApaguĂ© la televisiĂłn, me acerquĂ© a Ă©l y le dije: âEda, ÂżestĂĄs durmiendo?âLlamĂ©. Eda se dio la vuelta sin contestar y continuĂł con su truco de dormir. AcariciĂĄndose el cabello, dijo: âÂĄEda, es imposible dormir aquĂ, levantarse e irse a la cama!Dije. Eda se moviĂł un poco de derecha a izquierda sin abrir los ojos, pero continuĂł acostada. âÂĄLevĂĄntate, querida, y te llevarĂ© a la cama!âcuando lo llevĂ© en mi regazo, diciĂ©ndole, con los ojos cerrados,â ÂĄNo tengo madre, dĂ©jame dormir a tu lado hoy!âmurmurĂł. âÂĄEstĂĄ bien, querida!âasĂ que lo llevĂ© a nuestra habitaciĂłn y lo acostĂ©.
EncendĂ la luz nocturna, me quitĂ© los pantalones cortos y me acostĂ© en la cama. Eda continuaba con su truco de dormir de espaldas a mĂ. âÂĄEda querida, hace calor,te sentirĂĄs abrumado! âLe quitĂ© el camisĂłn, diciendo. Ahora solo le quedaban las bragas, y la parte de atrĂĄs de las bragas se habĂa metido decentemente entre las mejillas de su trasero. DespuĂ©s de mirarlo por un rato, se inclinĂł hacia su oĂdo y dijo: âÂżTe quito las bragas, cariño?âPreguntĂ©. Eda solo dijo: âÂĄHuh huh!âcuando murmurĂł, lentamente le quitĂ© las bragas . Ahora los dos estĂĄbamos desnudos. Me acerquĂ© justo detrĂĄs de Ă©l en la posiciĂłn 66, coloquĂ© mi polla entre sus piernas decentemente y lo abracĂ©âŠ
Aparte de dormir, el corazĂłn de Eda latĂa rĂĄpido. Mientras mi polla se movĂa entre los labios de su coño, los intercambios respiratorios se desaceleraban. El jugo de su coño comenzaba a llegar a mi polla. SalĂ por detrĂĄs y puse a Eda boca arriba. Ăl seguĂa con su truco para dormir. DespuĂ©s de llevar mi mano a sus diminutos pechos y acariciarlos un poco, lleguĂ© a su barriga, y de allĂ a su coño. Mientras mis dedos se movĂan sobre los labios de su coño, Eda comenzĂł a temblar como un pĂĄjaro atrapado en el frĂo. Luego abrĂ sus piernas, besĂ© y lamĂ ese coño ciego al mĂĄximo. Cuando comencĂ© a chuparle el clĂtoris, Eda estaba levantando su entrepierna y presionando su coño contra mi boca. De repente tuvo un orgasmo, temblando como si se hubiera electrocutado. Continuaba lamiendo. DespuĂ©s de que Eda tuvo un orgasmo, no pudo soportarme lamiendo su coño por mucho tiempo y cerrĂł las piernas.
Me levantĂ© de la cama, tomĂ© una o dos toallas de papel de la mesita de noche, primero limpiĂ© el agua de placer en la punta de mi polla, luego tomĂ© algunas toallas de papel en la mano y me parĂ© junto a la cama de Eda. Los ojos de Eda seguĂan cerrados. Puse mi polla en sus labios, querĂa que se la llevara a la boca. Puse la cabeza de mi polla entre sus dos labios, que Ă©l desacoplĂł ligeramente, y comencĂ© a caminar ligeramente de un lado a otro. Le ponĂa un poco mĂĄs en la boca cada vez que iba y venĂa. Mi polla estaba solo con la cabeza en la boca, simplemente acelerĂ© y alcancĂ© la cima del placer. SaquĂ© mi polla de su boca cerca de la eyaculaciĂłn y eyaculĂ© sobre la toalla de papel que tenĂa en la mano. Luego fui al baño y me lavĂ© la polla.
Cuando lleguĂ© a la cama, Eda estaba boca abajo, su mente seguĂa con el truco de dormir. Comenzando por el cuello, besĂ© sus hombros, espalda, cintura, lamĂ, lleguĂ© a sus muslos. SeparĂ© las mejillas de tu trasero como leche y deseĂ© tu pequeño trasero. Cuando le metĂ la lengua por el culo, Eda estaba mordiendo la almohada para no gritar de placer. No nos besaron, no nos olieron, no nos lamieron, no dejĂ© el lugar de Eda. Fui la Ășltima en recostarme boca arriba y levantar a Eda encima de mĂ. Sosteniendo sus caderas con ambas manos, la ayudĂ© a frotar contra mi polla con su coño. Eda todavĂa fingĂa dormir cuando tuvo otro orgasmo, pero despuĂ©s de un rato realmente se quedĂł dormida sobre mĂ.
Me levantĂ© temprano en la mañana, le puse las bragas y el camisĂłn a Eda y la cubrĂ con una manta. Tuve que ir a trabajar, y Eda tenĂa escuela. DespuĂ©s de prepararme, preparĂ© el desayuno de Edan y lo despertĂ©. Aunque fue difĂcil, se levantĂł. Le deseĂ© buenas lecciones y salĂ de casa, me fui a trabajar.
Constantemente pensaba en lo que sucedĂa por la noche en mi lugar de trabajo y esperaba con ansias la noche. Cuando salĂ del trabajo y volvĂ a casa, Eda habĂa regresado del campo de tenis media hora despuĂ©s que yo. Siempre se duchaba cuando volvĂa a casa de la clase de tenis. DejĂł su bolsa de tenis y fue al baño a ducharse. No podĂa perder esta oportunidad. DespuĂ©s de uno o dos minutos, toquĂ© la puerta del baño, la abrĂ y dije: âÂżQuieres que te enjabone la espalda, cariño?âPreguntĂ©. Eda estaba bajo la ducha de espaldas a mĂ. Ăl simplemente girĂł la cabeza y dijo: âÂĄHuh huh!âcuando Ă©l lo aprobĂł, fui al baño . Me desnudĂ© de inmediato y fui a ver a Edan bajo la ducha. Con el pretexto de enjabonarle la espalda, la enjabonĂ© masajeĂĄndole la espalda, la cintura, las caderas, las pantorrillas hasta los talones comenzando desde los hombros con champĂș.
Cuando le pisé los talones, me senté en el suelo. Cuando terminé de enjabonarle la espalda, giré su frente y abrà ligeramente sus piernas. Comenzando por la punta de los dedos de los pies, le enjaboné las piernas, el coño, el vientre y los senos masajeåndolos nuevamente. Me puse de pie, pero mi pene también estaba de pie. Mientras enjuagaba el cuerpo jabonoso de Eda con agua tibia, ella fijó sus ojos en mi polla.